Combinando gala y clima de fiesta, se celebró en la noche del martes el centenario de la Asociación Mutualista del Docente de Córdoba.
El primero de los dos momentos diferenciados, fue el acto protocolar que se llevó a cabo en el elegante auditorio de la Universidad Católica de Córdoba, absolutamente colmado de público. La nutrida concurrencia estuvo compuesta por asociados, dirigentes de mutuales de la ciudad de Córdoba y muchos del interior provincial, referentes de la Federación cordobesa, funcionarios públicos y allegados. La organización fue ajustada en todos sus detalles, para lo cual, se observó en todo momento la atención de toda la dirigencia de la entidad y su personal.
La ceremonia alternó entre discursos, entrega de recordatorios y la presentación de la Banda de música de la Fuerza Aérea, la Escuela de ballet folclórico Confluencia de Alta Gracia, y el Coro Municipal de La Cumbre.
Hubo momentos para rendir homenajes a dos ex presidentas de la mutual, María Virginia Luppi y Angélica Díaz de Vélez, cuyo recordatorio fue recibido por su hijo. Tanto la Legislatura de la Provincia, como el Concejo Deliberante de Córdoba, emitieron una Declaración de Beneplácito por el acontecimiento, cuyos textos fueron leídos en el escenario.
La bienvenida estuvo en la palabra de Celia Serrone, la presidenta de la AMD: “¿Qué son los cien años? Para la humanidad, un instante; para la civilización, un continuo devenir; para instituciones como la nuestra, una vida hecha de jirones de historia. Estas instituciones que nacieron a principios del siglo XX, tuvieron el impulso, la impronta de la Reforma Universitaria. Todavía suenan en nuestros oídos lo que decían aquéllos patriotas de la Reforma: ‘Los dolores que nos quedan, son las libertades que nos faltan’. Y aquí estamos, en este mundo controvertido, con tantos problemas, con guerras fratricidas, un mundo en el que hay problemas sociales, políticos, económicos, en el medio estamos nosotros, los que pertenecemos a las asociaciones de la Economía Social. Hemos sido fieles al acta fundacional, donde nuestro fundador decía que construir sobre ideas es construir sobre el porvenir. A lo que nosotros agregamos: los que trabajan por la paz, por el amor, por la solidaridad, para que se cumplan los derechos, son los que trabajan para el hombre, los que trabajan para la humanidad”.
En representación de FEMUCOR, su secretario Héctor Acosta trasladó el mensaje de salutación: “Este hecho nos hace reflexionar sobre el tiempo dedicado a la ayuda mutua. Si lo multiplicamos por la cantidad de personas que entraron a esta casa buscando una solución; si lo multiplicamos por la cantidad de servicios prestados ante las necesidades de tantos docentes, serían 1.200 meses, más de 36 mil días, casi 300 mil horas. Y esto habla a las claras de lo que significa ser una mutual, una institución que hace el bien. Una mutual que siempre tiene las puertas abiertas, que trabaja por la solidaridad, y por esos persisten. Donde tendemos una mano habrá una necesidad, pero seguramente también habrá un derecho. Cuando nacieron las mutuales no existía la seguridad social, eso era algo que daban las mutuales. Es un orgullo tenerlas dentro de la Federación, que sean parte de nuestra organización, que nació en cierta forma de la mano de ustedes hace más de 70 años. La presencia de Córdoba en el mutualismo nacional, se debe al trabajo y empuje de todos ustedes”.
También expresó su congratulación, el Subsecretario de Cooperativas y Mutuales de la Provincia, Abraham Galo: “Nuestra provincia es señera en materia de cooperativismo y mutualismo, y tenemos la dicha de contar con docentes en ese ámbito. Muchísimas gracias por todo lo que hacen. Córdoba y el país necesitan de mucha más gente como ustedes, dispuestos a transformar la provincia y la realidad del país, haciéndola más solidaria. Gracias por ser soñadores”.
Terminado el acto, se dio paso a la segunda instancia de la celebración festiva. Ya en la sede la Mutual del Docente, se ofreció un ágape y brindis final para los cientos de invitados que ocuparon todos los pisos de la sede, ámbito que puso en evidencia la acostumbrada camaradería del sector.
