Entre el criminal suceso en Nueva York del 8 de marzo de 1908, y la visibilidad de las luchas feministas contemporáneas, hay –en el medio- una diversidad de reconocimientos a mujeres que, aun sin tener una alta exposición pública notoria, nutren al colectivo a partir de la tarea cotidiana sin estridencias, pero igualmente constructiva.

La agrupación Colectivo de Género de Traslasierra, el valle del oeste cordobés, resaltó con un homenaje a Martha Romero, delegada de la filial Villa Dolores de la Asociación Mutualista del Docente, e integrante de su Junta Directiva.

Martha es profesora y licenciada en Historia, socióloga, profesora de nivel terciario, docente universitaria e integrante de la Junta Municipal de Historia de Villa Dolores.

La vocación docente no la limitó al ejercicio de su profesión en las aulas, sino que le sirvió para ser impulsora por la radicación de una educación superior en su ciudad, que permitiese darle oportunidad de cercanía a la juventud del Valle de Traslasierra. Para quienes vivimos en grandes centros urbanos, la oferta educativa post secundaria es abundante. Pero en el interior profundo, las posibilidades son tan limitadas, que cada año se produce un éxodo hacia las grandes ciudades de quienes anhelan forjarse una profesión. Para Martha Romero, este objetivo se constituyó como una causa de lucha desde hace cuatro décadas.

Después de varios intentos que siempre encontraron obstáculos impensados, desde el segundo decenio de este siglo, pudo ver materializado el Centro Regional de Educación Superior, paso previo y necesario para aspirar a la creación de una universidad. Primera responsable académica, acompañó paso a paso la puesta en marcha de ese centro y la infraestructura adecuada para su funcionamiento actual.

Su rol como delegada en la Mutual del Docente, lo practica desde el sentimiento de pertenencia, y lo define como “… un espacio para dar respuestas a la gente; nos da cobijo. Pero la clave de esta tarea, no está en el ejercicio de un rol individual, sino en la acción en conjunto, el trabajo en equipo. Yo creo que las mujeres tenemos la capacidad para llegar a las partes más sensibles de la sociedad, que precisamente es la esencia del mutualismo, y por eso estamos acá, haciendo esta tarea, fundamentalmente con enorme cariño”.

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