CAPACITARSE PARA CREAR VALOR

Marita Carbonell coordina la plataforma Aprender en Red, el centro de capacitación permanente de la Confederación Argentina de Mutualidades.

A través de esta columna, traza los argumentos que dan razón al derecho y al compromiso con la formación continua, como medio para la evolución de las personas y, por extensión, de las organizaciones asociativas que integran el universo de la economía solidaria.

Animarnos a hacer nuevas preguntas para buscar nuevas oportunidades

Escribe Marita Carbonell (*)

Cuando observamos, cuando nos permitimos observar, salimos de la caja del individualismo ideológico, sacamos el piloto automático y entramos en un proceso más consciente que nos permite potenciar el control de nuestros actos.

Es importante comprender esto, porque hoy tenemos que estar más presentes que nunca y reaccionar ante los cambios que necesita el planeta y la sociedad. No podemos dejar de responsabilizarnos.

Estamos transitando la 4° Revolución Industrial (4RI) ¿qué significa esto? Implica una revolución tecnológica que modifica fundamentalmente la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos, afectando la empleabilidad, la desigualdad en el ingreso de las personas, la necesidad de la innovación inminente en todo proyecto, impactando principalmente en los marcos éticos de todos los espacios compartidos.

Ante esto, que parece complejo, encontramos una oportunidad mayúscula: la inminente importancia del pensamiento divergente y creativo, la libertad de expresión, la posibilidad de redefinir al ser humano, impulsando y transformando nuestra manera de diseñar nuestros propósitos, tan propio de nuestro sector social y solidario.

El mundo se está abriendo al conocimiento y accedemos a  nuevas maneras de gestionar la economía con una profunda modificación del sistema, siendo el eje fundamental de este cambio la sensibilización de la humanidad la cual depende de cada uno.

Características como la creatividad, empatía, resiliencia, pensamiento crítico, comunicación y colaboración cobrarán cada vez más importancia para crear un modelo innovador, de trabajo colaborativo que respete la diversidad.

¿Cómo avanzamos en estos escenarios? Una de las herramientas poderosas utilizada en el pasado, el presente y será también en el futuro, es el derecho a la educación la cual implica  el compromiso de ser cautelosos y conscientes de lo que se comunica.

Considero en este punto advertir la acción transformadora de animarse a hacer preguntas, una educación abierta y colaborativa. Siguiendo a Paulo Freire, él decía en relación a las preguntas: “sin esa aventura no es posible crear. Toda práctica, educativa que se funda en lo estandarizado, en lo preestablecido, en la rutina en que todas las cosas están predichas, es burocratizante, y por eso mismo antidemocrática, no permite avanzar en libertad”.

Como síntesis de lo expuesto y como educadora, considero que la educación y la formación continua es un pilar fundamental para evolucionar y crear valor con nuestras acciones, sin temor, ¡las oportunidades nos esperan!

(*) Licenciada en Administración y Recursos Humanos, especializada en Ciencias de la Educación y nuevas tecnologías; Coordinadora de Aprender en Red

ESCRIBANOS UNA RESPUESTA

Por favor escriba su comentario
Por favor ingrese su nombre acá