El presidente de la Mutual Carlos Mugica, Marco Galán, se pronunció a favor de una articulación entre las organizaciones de la Economía Solidaria y aquéllas que se configuran como de Economía Popular.

En declaraciones a FM La Ranchada, el dirigente sostuvo la necesidad de “cambiar la matriz de pensamiento en estos sectores, con una visión más amplia y generosa”.

Galán reconoce que “… hay una parte del mutualismo y el cooperativismo que está consolidado. Pero hay organizaciones de la economía popular que en muchos casos están conformados también como esas entidades, pero son muy pobres en recursos. Entonces, es necesario construir un puente de solidaridad para que los fondos que manejan las entidades con mayor envergadura, se hagan circular dentro del sector, incluidas las entidades con mayores dificultades económicas”.

El titular de la Mutual Mugica considera que hay puntos en común en el origen de las entidades hoy englobadas en distintos segmentos: “En perspectiva histórica, los dos movimientos coinciden en las razones que les dio inicio. Tanto el mutualismo como el cooperativismo surgieron desde fines del siglo 19 y principio del 20, como respuesta a las necesidades de trabajadores que no estaban sindicalizados, es decir, excluidos. Y los trabajadores de la economía popular, surgen cuando el liberalismo los expulsa del sistema y los convierte en informales sobre todo a partir de los años ‘90”.

Sobre las medidas de acercamiento para involucrar ambos movimientos, Marco Galán, quien además se desempeña en comisiones técnicas del INAES y es miembros del Consejo Consultivo del organismo, anunció que se viene trabajando en el diseño de medidas concretas. Entre ellas, el fomento para que las entidades mutuales y cooperativas consolidadas que desarrollen planes de vivienda, contraten mano de obra proveniente de organizaciones de la economía popular y no a empresas privadas de la construcción con fines de lucro. También mencionó el impulso a la compra de productos elaborados por el sector, para satisfacer la demanda de servicios de las mutuales, por ejemplo los provenientes de talleres textiles y alimentos.

“Cada rubro –dice Galán- puede disponer de acciones concretas, a partir las decisiones políticas del sector para tejer una unidad entre economía solidaria y popular, generando una real economía alternativa. Nosotros creemos que las organizaciones de origen popular tienen una base con más conciencia autogestiva, donde el asociado se siente parte de las decisiones y no un usuario de prestaciones. Estoy a favor de una desburocratización del sistema, y en este sentido me parece que es preciso cambiar la legislación actual para mutuales y cooperativas”.

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