El Centro de Estudios Económicos y Sociales (CESO) publicó su nuevo informe que evalúa el comportamiento de precios de alimentos, comparando entre los comercializados por los espacios asociativos y los del supermercadismo en general.
El análisis comprende el bimestre julio-agosto, con un testeo sobre 40 productos de la canasta básica de alimentos (CBA) en la ciudad de Buenos Aires. El dato más destacado es que durante el mes de agosto, mientras los precios en supermercados subieron un 15,4%, en los comercios de la Economía Social y Solidaria (ESSyS) el incremento registrado fue de apenas 5,81%.
El informe revela que, comparando los precios entre agosto 2020 y agosto 2021, se puede observar que para la CBA de los supermercados hay una variación interanual del 65,11%, mientras que en las ESSyP se registró una variación interanual del 55,77%.
De esta manera, se observa que la ESSyP puede dar cuenta de una amplia variedad de productos y de precios competitivos para el sector, demostrando a lo largo del periodo analizado que es más barato comprar en las comercializadoras en relación a los precios de los supermercados. Queda a la vista la necesidad de fortalecer un sector que puede en el corto plazo tener periodos de precios iguales y/o en alguna ocasión por encima de los supermercados; pero que en el largo plazo vemos que no tiene impacto porque es momentáneo. Es decir que logra ser un espacio más barato.
Resulta central entender que hablamos de experiencias que están ofreciendo productos de cooperativas, emprendimientos familiares y asociativos y en su mayoría agroecológicos. Lo antes mencionado requiere en muchas ocasiones un esfuerzo de logística y asistencia al productor que un supermercado no realiza. Es en este tipo de acciones que la diferencia que notamos de precios con menor velocidad de crecimiento en la ESSyP, toma un mayor impacto.
Todos los datos relevados muestran la potencialidad de un sector económico con otras lógicas pero con efectos claros sobre la economía local y nacional, existiendo varios beneficios a nivel socioeconómico como mejoras en las condiciones de los productores o la democratización del sector, que permite abrir a nuevas producciones y actores para mejorar el acceso a los alimentos y redistribución del ingreso.
Fuente: Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz