El Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), publicó la semana anterior su informe mensual, que devela precios comparativos de la canasta básica de alimentos entre locales de la Economía Social, Solidaria y Popular (ESSyP) y supermercados del sector lucrativo.

De este relevamiento surge que en el mes de julio la canasta básica en locales de la ESSyP ascendió a $ 21.194,47 (9% más que en junio). La de supermercados fue de $ 21.814,73.

Tomando el trimestre mayo, junio y julio, los comercios de la economía solidaria se mantuvieron por debajo de las comercializadoras del sector lucrativo en los tres meses.

Pero desde otra perspectiva, el número de productos que se puede encontrar en el conjunto de comercializadoras de la ESSyP  es de 40, mientras que el total de los que se toman para la construcción de la canasta básica de alimentos, es de 62.

Por eso, en el mes de julio, resultó más caro comprar esos 40 artículos en los espacios de la ESSyP que en el resto de los supermercados. Para los primeros, se necesitaron $ 11.381,31, en tanto que para los segundos, $ 10.794,93.

El CESO sostiene que si se analizan los rubros, se puede ver que en el de frutas y verduras tanto en el mes de junio como de julio resultó más conveniente adquirirlas en los supermercados. Cabe destacar que se están comparando verduras de producción agroecológica y/o en transición con verduras comunes.

En las conclusiones del informe, se expresa que los precios en la ESSyP experimentaron un gran incremento durante el mes de julio pero esta situación se puede explicar por los pequeños o nulos movimientos que sufrieron durante los meses anteriores. Esta situación se puede explicar por los saltos estacionales que ya se han verificado anteriormente y corresponden a un reacomodamiento de precios que coincide con la reposición de mercadería. A diferencia de lo que ocurre en los supermercados donde el aumento de precios se da de manera sostenida y constante, en las comercializadoras se producen los cambios a la hora de reponer los productos.

También podemos identificar rubros donde existe una diferencia a favor de los supermercados que tiene que ver con niveles de infraestructura y de volúmenes que le permiten vender determinados productos y a veces a menores precios.

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