Esta semana se anunciaron dos hechos que, aunque parezcan de distinta naturaleza, ambos confluyen en la inclusión de lo que produce la economía social en la vida doméstica de la comunidad.
Ya los modelos asociativos exceden sus prestaciones a sus asociados, para colarse en las demandas de la sociedad en su conjunto.
Una de las informaciones dio cuenta de la puesta en marcha del programa “De la quinta a tu mesa”, por el que trabajadores frutihortícolas agrupados en cooperativas, pueden comercializar sus productos de manera directa y sin intermediación en una de las cadenas de supermercados de mayor volumen del país.
Aunque el anuncio se formuló en estos días, la experiencia se viene desarrollando desde hace dos meses en la ciudad de La Plata, en una de las sucursales que posee una empresa comercial de gran superficie. En este tiempo, ya se vendieron más de doce mil kilos de producto tales como variedades de lechuga, tomates, zapallitos, berenjenas, entre otros, a un precio equivalente al del Mercado Central. Esto representa un 40% menos que en el resto del canal supermercadista.
El programa, generado desde el Ministerio de Desarrollo Social, permite el acceso formal a actores de la economía social hacia los consumidores. Previamente hubo una capacitación para garantizar mercadería que cumpla con los estándares de la comercialización de los agroalimentos.
La iniciativa está en etapa experimental, pero desde tanto desde el ministerio como desde las cooperativas, estiman que el modelo está en condiciones de replicarse en otros puntos del país, en consonancia con otras propuestas que se vienen desarrollando silenciosamente, aunque en menor escala.
La incorporación en la economía del Chaco
En la provincia del noreste argentino, también buscan ponerse a tono con el potencial que significa el sector para dar respuestas a la población en general con productos y servicios.
Como punto de partida se realizó el Primer Encuentro Cooperativo Chaqueño, promovido desde el poder ejecutivo local. El gran objetivo de la convocatoria fue instalar la idea que las cooperativas sean agentes del desarrollo territorial y de transformación.
Resultó muy amplia la participación de asociados, consejeros, síndicos, gerentes y empleados de las cooperativas chaqueñas, de distintos sectores y ramas de actividad. Este nivel de presencia permitió un intercambio de conocimientos e información sobre los productos, servicios y trabajos especializados que ofrecen las organizaciones de raíz solidaria, y las perspectivas para aumentar la integración, complementación y trabajo asociativo en red.
La actividad contó con una intervención dinámica de los asistentes, cuya coordinación estuvo a cargo de Eduardo Fontenla. Asimismo, Carlos Enrique Gómez de la Asociación de Mutuales Chaqueñas Federadas y vicepresidente de la Confederación Argentina de Mutualidades, aprovechó el encuentro para exponer los objetivos del Polo Productivo Chaqueño, espacio que busca el desarrollo y sostenibilidad de la economía social.
