A partir de la incorporación de las telecomunicaciones a la lista de servicios esenciales, las empresas privadas lucrativas tomaron distintos caminos. Unas se allanaron a los topes de aumentos en las tarifas dispuestos por el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), y otra, la de mayor peso por su volumen operativo, ignoró tempranamente la disposición del Estado Nacional, y luego se tomó su tiempo para judicializar su posición y obtener un fallo favorable a sus intereses. La empresa Telecom nunca dejó de aplicar incrementos en sus servicios de telefonía, televisión e internet, según sus propios parámetros y criterios de evaluación de costos y beneficios.

El ENACOM hizo distinciones con las cooperativas que hacen las mismas prestaciones, permitiendo aumentos levemente mayores a los autorizados para el sector lucrativo y en menor tiempo. La tabla para esta primera parte del año contempló actualizaciones del 8% desde enero, 7% en febrero y otro 7% en marzo.

Felipe Sabahini, directivo de la mutual y cooperativa de la localidad de Santiago Temple, al sur cordobés, sostuvo que los últimos balances de los servicios de televisión e internet que presta el grupo asociativo arrojan resultados negativos. “Si tomamos el índice inflacionario del año pasado y la proyección de este que va en curso, es claro que los incrementos autorizados están lejos de cubrir esas cifras”, asegura el dirigente.

Sabahini no pone en duda la condición de esencialidad del servicio de telecomunicaciones, pero se plantea el cómo hacer para enfrentar la suba de costos en la prestación: “Nuestros proveedores de señales de TV e internet mantienen los mismos valores desde hace algo más de un año, pero los materiales, insumos y mano de obra que requerimos para sostener y cubrir las nuevas demandas de los asociados sí aumentaron a un ritmo similar al de la inflación”.

Frente al escenario, la entidad ha modificado algunas de las políticas de comercialización, lo que a juicio del directivo “recaen en el achicamiento de las bondades del sector asociativo que ofrece el servicio. Por ejemplo, ya no podemos sostener la gratuidad de las nuevas conexiones o la extensión de redes”.

Por lo pronto Felipe Sabahini anunció que la cooperativa hizo una presentación de manera individual ante el ENACOM, solicitando una nueva revisión de tarifas, basándose en que el sector no acumula ganancias sobre el servicio y que por el contrario, está cumpliendo con una necesidad de buena parte de la población, a un costo muy por debajo de los precios de las empresas lucrativas.

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