El proyecto de presupuesto para el año próximo que presentó el Ministro Sergio Massa, prevé partidas por $ 9.390.043.815 para el Instituto Nacional de Asociativismo. De ese monto, las metas de inversión destinados a la promoción, capacitación y fomento para entidades cooperativas y mutuales, alcanzarían los $ 6.249.796.289.
La política presupuestaria institucional para el año 2023 pretende impulsar a las cooperativas de trabajo, a las de servicios públicos, a entidades que produzcan cadena de valor alimenticio y proveedurías. Se agregan dos elementos novedosos en el diseño de las inversiones que busca alentar el INAES: mutuales y cooperativas con servicios de cultura y comunicación, reconversión tecnológica aplicada a las posibilidades que abrió la reciente Ley de Cannabis Medicinal y Cálamo Industrial.
Textualmente, el proyecto de presupuesto referido al INAES, detalla la creación de líneas específicas de asistencia y fortalecimiento para:
- Cooperativas de trabajo, permitiendo a la economía social contribuir a la recomposición de la actual fragilidad del mundo del trabajo y la producción de nuestro país, haciendo particular hincapié en las empresas recuperadas.
- Cooperativas de servicios públicos, considerando la amplitud y arraigo federal de su estructura de servicios, a través de la cual se provee de servicios públicos esenciales a una vastísima cantidad de asociados y asociadas, habida cuenta del particular estado de fragilidad que dichas entidades atraviesan.
- Cooperativas y mutuales que produzcan bienes y servicios vinculados a la cadena de valor alimenticia, con el objeto de generar mejores condiciones de producción, logística y almacenamiento, articulando con las entidades de segundo y tercer grado el impulso de proveedurías que permitan fortalecer los circuitos de comercialización y generen alternativas viables en pos de resolver el problema logístico y de colocación de productos de la economía social y solidaria en las góndolas.
- Cooperativas y mutuales que presten servicios culturales y de comunicación, que se erijan como alternativa a la organización del trabajo y la producción de dichas industrias ante el escenario crítico de dicho sector.
- Cooperativas y mutuales que, a la sazón de la sanción de la Ley de Cannabis Medicinal y Cálamo Industrial, quieran llevar a cabo reconversión tecnológica constituyéndose como nuevos actores de dichas cadenas de valor.
