Ante la avanzada del Banco Nación sobre las cuentas corrientes de mutuales del interior, procediendo unilateralmente a su cierre, dirigentes adoptan medidas judiciales, sin disimular la molestia por lo que consideran incomprensible.

La Mutual del Club Atlético de Villa Santa Rosa, recibió la notificación anunciando el cierre de su cuenta e inmediatamente presentó un amparo ante el Juzgado Federal número 3, con asiento en la ciudad de Córdoba.

Martín Elías, presidente de la entidad y abogado, explicó que la solicitud ante la Justicia se basa en criterios de abuso, arbitrariedad e ilegalidad, dado que los actos administrativos de la institución financiera, no pueden ser incausados; es decir, deben sostenerse en algún hecho que justifique la acción.

A lo fáctico de la medida, se agrega la incertidumbre sobre las causas que motivan estas decisiones, y por ende, por el devenir. Distintos gerentes de sucursales del Banco Nación, aducen que son medidas tomadas por su propio criterio, conforme a lo establecido por el artículo 1404 del Código Civil y Comercial, mientras que otros se excusan en que se trata de directivas bajadas desde la casa matriz. Incluso un gerente adujo que existía una circular con instrucciones en este sentido, aunque el mismo funcionario nunca exhibió la supuesta comunicación.  Algunos le ponen paños fríos tratando de explicar que se trata de decisiones contra situaciones puntuales, pero como las medidas se multiplican, queda la sensación de que puede ser abarcativa a numerosas entidades mutualistas.

Cuando la dirigencia de la Mutual del Atlético se hizo presente en la sucursal bancaria de Villa Santa Rosa, luego de ser notificados, el gerente le advirtió que la dependencia de La Puerta también le cerraría la cuenta que la mutual tiene en su filial de esa localidad. Sin embargo, el gerente de la casa bancaria de La Puerta, negó esa posibilidad.

El presidente Martín Elías se lamenta de la situación: “Ya el año pasado, el Banco no quiso recibirnos depósitos en cheques, sin argumentos claros. Nos exigieron una cantidad de documentación, incluso el padrón de socios,  a lo que nos allanamos. Luego, hace un mes atrás, nuevamente nos pidieron otra documentación, como balances, actas, poderes, que también reunimos y presentamos tal como lo solicitaron. Lo que más me molesta es que nos esforzamos por tener todo impecable, con prolijidad y totalmente dentro de la ley. Por supuesto que esto no exime que incursionemos en algún error involuntario; pero si así fuese, necesitamos que nos expliquen cuál es el error, qué es lo que estamos haciendo mal, para inmediatamente trabajar en lo correctivo. Queremos y debemos estar conforme a las normas”.

Dentro de esta problemática, están los casos de la Mutual Centro de Brinkmann y la del Club 9 de Julio de Morteros, quienes en 2016 obtuvieron una cautelar ordenada por la jueza Alejandrina Delfino, del Juzgado de Primera Instancia del Poder Judicial de la Provincia de Córdoba, con sede en la localidad de Morteros.

Los abogados representantes de ambas entidades, Fernando Baudino y Carlos Zabala, accedieron a dialogar con este medio, y explicaron sus fundamentos, la decisión de acudir a un Juzgado cordobés y las acciones paralelas iniciadas a la presentación del amparo. Prensa Con Opinión publicará mañana la interesante visión de los letrados que, desde hace más de un año y medio, lograron que las mutuales mencionadas puedan seguir operando con la entidad crediticia oficial.

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