La campaña emprendida por la Asociación Mutual de Profesionales del Hospital Italiano, en prevención de la hipertensión arterial y diabetes, ha dado un resultado tan auspicioso, que la entidad rápidamente dispuso la extensión del servicio abierto al público hasta fines de este año.
Los puestos para el control gratuito de HTA y DBT, se desplegaron durante cuatro días la semana pasada, y estuvo enmarcada en el programa ideado por la Federación Argentina de Mutuales de Salud, con el apoyo del INAES, bajo la concepción de la atención primaria de la salud, como herramienta indispensable para brindar un servicio de calidad.
La campaña se desarrolla en todo el país, a través de mutuales federadas. En el caso de Córdoba, fue la organización solidaria del Hospital Italiano, la que tuvo a cargo su implementación. Con puestos visibles instalados en el nosocomio de barrio General Paz y en la mutual de Empleados y Funcionarios del Ministerio de Acción Social, profesionales atendieron a cientos de cordobeses de manera gratuita y abierta a la comunidad, sea o no asociada a una mutual.
El saldo de la actividad, permitió hacer detección precoz de estas enfermedades, y en varios casos fue la posibilidad para que mucha gente tomase conocimiento en el lugar, del potencial riesgo en sus niveles de diabetes y presión arterial, lo que desembocó en el consejo de derivación a sus servicios médicos para el seguimiento y tratamiento de su problema detectado.
La respuesta ante la iniciativa fue de tal magnitud, que la Mutual del Hospital Italiano decidió ampliar la prestación hasta fines de diciembre, con puestos instalados en lugares estratégicos de concurrencia de público, y hacerlo extensivo a otras ciudades de la provincia.
El impacto social del método, ha dejado a las claras la necesidad de personas que no tienen la posibilidad de realizarse un control, y que encontraron en este emprendimiento mutual, un servicio al que no resulta fácil acceder. Así lo explicó el gerente de la institución, Luis Gisbert: “El balance de la campaña es altamente positivo. Muchas personas se enteraron aquí que tienen un riesgo en algunas de estas dos enfermedades, y de ahí en más, ya están en conocimiento que deben hacer una visita a su médico para seguir un tratamiento adecuado. La misma gente es la que nos decía que no hay lugares a dónde acudir para medirse la glucosa o el nivel de su presión, cosa que nosotros sabemos que es una realidad en el sistema sanitario. Una persona, sobre todo los mayores, que necesita hacerse una medición, ¿a dónde va?; si entra a una clínica, no se la atiende, porque la guardia no está para eso; entonces va a un médico, y tiene que abonar la consulta, por lo que se le complica a cualquiera. De modo que, al menos hasta fin de año seguiremos con los puestos; incluso seguramente ampliaremos la prestación en Villa Carlos Paz, Alta Gracia y Jesús María. Luego evaluaremos cómo encararlo para 2020. Esto que estamos haciendo, permite advertir sobre la posible cronicidad de una enfermedad, y evitar males mayores en la salud y en los costos de su atención”.
Con la implementación de este programa, la mutualidad también encontró una forma de involucrarse en un tema tan sensible como la salud pública. De cara a la comunidad y sin ningún requerimiento previo, atender sin cargo a la población, significa extender un servicio más allá de la masa de asociados, incluso para quienes no están dentro de un padrón de una entidad. Así se reflejó durante la semana pasada, al dar cuenta de la espontánea participación de quienes necesitaron su control y valoraron la prestación.